EL negro tiene doble turbina, así que el tiempo de secado se reduce, literalmente, a la mitad. Algo que se agradece cuando tienes cantidades ingentes de pelo. Incorpora un tratamiento acondicionador en forma de cápsulas, que el secador vaporiza sobre el cabello durante el secado, pero, la verdad, yo no las he probado, porque con la mascarilla y el acondicionador tengo suficiente, pero Natalia Verbeke me ha confesado que a ella le funcionan.
Antes del Collexia, siempre compraba secadores de peluquería, como parlux, tienen una buena potencia entre 1.800 y 2.000 W y son muy ligeros. Fundamental cuando te haces el brushing y no quieres terminar con el brazo como el de Terminator.
Para mis viajes, siempre me llevo este pequeñito de Artero Mojito. Pequeño pero matón, porque tiene 1.000 W de potencia, dos metros de cable y dos velocidades. Y lo mejor: Nunca me deja tirada. No hay cosa que más rabia me dé que esos secadores de hotel que se queman a los tres minutos de empezar a secarte el pelo.
Qué debes mirar al comprar un secador:
1. La potencia entre 1.800 y 2.000 W.
2. Que el cable sea lo suficientemente largo para que puedas manejarte con soltura (mínimo 2 metros).
3. Que incluya boquilla y difusor.
4. Botón de aire frío. Es muy útil si te tienes que pegar mucho a la raíz del pelo, por ejemplo, en el flequillo. Y sí, lo hacemos todas, aunque los peluqueros digan que hay que poner el secador a 20 cm del cabello. ¿Has visto a algún estilista que no pegue la boquilla al cepillo?
5. Que sea ligero, porque si no te cansarás enseguida y romperás a sudar a los dos minutos.
1. No uses cepillos de metal, porque se calientan en exceso y machacan la fibra capilar.
2. Antes de hacerte el brushing, deja que el pelo se seque un poco . No hay nada peor para el cabello que empezar a secar con el pelo empapado.
3. Si puedes no lo seques, o haz trampa. Muchas veces sólo me seco la parte frontal y el flequillo. El resto lo dejo a su libre albedrío.
4. Por partes. Empieza por la capa de abajo del todo. Es importante que quede bien seca, porque si no quitas la humedad, el pelo no quedará bien. Divide el pelo en tres: traza raya al medio y recoge con pinzas los laterales (un moñito a cada lado), la parte de atrás divídela en dos capas. Recoge la superior con una pinza y empieza a secar la inferior.
5. No uso cepillos redondos. Prefiero uno de pala y de madera, porque en una sola pasada coge más pelo y termino antes.
6. Antes podía estar hasta una hora con el brushing. Ahora, simplemente, quito la humedad y doy un par de pasadas con el cepillo de pala hasta secar bien el pelo. La forma la consigo con mis maravillosa planchas ghd, que te permiten dar forma a la melena como si fuesen un cepillo redondo. Son caras (190 €) pero, sin duda, la mejor inversión cosmética. Yo ya no voy a la peluquería. ¡Ni para una boda!
Y hasta aquí mi post, mañana os enseñaremos nuevas novedades, y el post será de cremas.
Maria & Sara.

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Me hace mucha ilusión que comentéis en mi blog.
Cada, comentario que leo para mi es un empujoncito más para seguir adelante.
Doy gracias porque salga el sol día a día.
¡Gracias por vuestros comentarios!
María.